Una discusión terminó en masacre en una fiesta infantil en Carúpano

Hospital-de-Carúpano

Los muertos fueron llevados al hospital de Carúpano.

La alegría que caracteriza a la comunidad de Playa Grande, en Carúpano, se vio empañada el domingo 22 con la muerte de  Jorge Isaac Rojas Indriago, de 18 años, César Armando Hernández  (36), Liliana Marín (19), Humberto Rafael Felce (27), hijo de un funcionario policial, y Carmen Maneiro (55), quien era exfuncionaria policial e  ingresó con signos vitales al hospital de la jurisdicción, pero murió en la madrugada de este lunes.

El hecho se registró en la calle principal de Playa Grande, cuando se realizaba una fiesta infantil. Los testigos relataron que a las 10:00 de la noche, invitados a la fiesta insistieron en bailar con una dama que estaba en una licorería cercana en compañía de su hijo y su esposo, quien es funcionario policial.

Presuntamente, la dama rechazó la invitación y un grupo de  hombres comenzó a ofenderla. Ante el hecho, el hijo tomó el arma de reglamento del padre y disparó en la reunión.

Luego de las primeras detonaciones, un proyectil alcanzó a Marín, quien murió al instante. Esto originó un tiroteo entre ambas partes que dejó un saldo de cuatro muertos y un herido de gravedad.

El pánico se apoderó de la comunidad de Playa Grande. Los gritos y gente corriendo no dejaban ver quiénes eran los fallecidos. Todos fueron trasladados en un vehículo particular al Hospital Santos Aníbal Dominicci, pero cuatro llegaron sin vida y una murió horas después de su ingreso.

Experticias

Funcionarios de la Policía Estadal informaron que por el hecho fue aprehendido Omar Paredes, de 51 años, funcionario de Polisucre al que se le decomisó el arma de reglamento utilizada por su hijo durante el suceso. Paredes fue trasladado a la Comandancia General de la Policía Estadal de Sucre, ubicada en Cumaná.

Las autoridades también están tras el paradero de Jesús Moreno Chune, de 37 años, familiar de la primera dama asesinada y quien estuvo involucrado en el tiroteo.

reseñado por Yesenia Garcia | El Pitazo