Erick Chourio nunca había sufrido un atentado. Presumen que se pueda tratar de una venganza en contra de su hermano «Pepito», quien pertenece a las filas de la banda del «Mocho Edwin»
De múltiples impactos de bala asesinaron ayer en la mañana a Erick Chourio, propietario y entrenador de caballos, dentro de las instalaciones del Hipódromo de Santa Rita. La Policía científica maneja como móvil del crimen la venganza. Trascendió que la víctima era hermano de Endry Benito Chourio, alias «Pepito», expram de la extinta cárcel Nacional de Maracaibo, de donde salió en libertad tras su clausura en septiembre de 2013.
El lugar apenas abría para iniciar con las inscripciones de caballo para el festival de carreras que inicia la próxima semana. La víctima, quien es oriunda de Maracaibo, al entrar al lugar se quedó hablando con allegados y amigos en el área donde desarrollarían la actividad. En cuestión de segundos ingresaron a toda velocidad, según testigos, los asesinos en moto con sus rostros descubiertos. Burlando la seguridad con sus armas se acercaron hasta las mesas de las inscripciones, donde se encontraba Chourio, lo apuntaron y le dispararon en más de 10 oportunidades.
El resto de los presentes resultaron ilesos. Estos intentaron ofrecerle los primeros auxilios al malherido, pero estaba muerto. Las balas que atravesaron su humanidad lo fulminaron. De los homicidas los testigos solo alcanzaron a ver cómo huyeron tras cumplir su objetivo.
Luego del hecho los organismos de seguridad se dedicaron a patrullar la zona y sus sectores adyacentes, pero no alcanzaron a atrapar a los homicidas. Fuentes ligadas a la investigación señalaron que Chourio nunca había sufrido un atentado y con frecuencia visitaba el hipódromo. Sin embargo presumen que se pueda tratar de una venganza en contra de su hermano «Pepito», quien pertenece a las filas de la banda del «Mocho Edwin». No descartan que su muerte este ligada a las mafias.
La Verdad