Denunciaron que el anciano murió luego de recibir golpes en un geriátrico

El hombre, de 82 años de edad, presentó heridas en el rostro, cabeza y las manos, y pudo ser atendido en los centros de salud a donde fue trasladado, aseguraron parientes

Arturo Guillén/El Nacional

En una cama de un geriátrico ubicado en la avenida Las Fuentes, en El Paraíso, se encontraba un anciano de 82 años de edad atado al camastro y con signos de maltrato el sábado 6 de enero. Se llamaba José Antonio López y el lunes 8, luego de una sufrida travesía entre CDI y hospitales, finalmente falleció en una silla de ruedas en los pasillos del Miguel Pérez Carreño, relató Jessica Flores, familiar del octogenario.

La historia se remonta al 8 de diciembre de 2017 cuando familiares de José Antonio López lo ingresaron en el geriátrico Galipán, también localizado en El Paraíso, porque se iban de viaje y no tenían quién pudiera cuidarlo, pero debido a que en ese lugar necesitaban hacer reparaciones, se les imposibilitaba cuidar a los ancianos. Entonces, los familiares decidieron internarlo por un mes en el  Geriatrix, casa hogar de ancianos.

El 26 de diciembre varios parientes lo visitaron y compartieron con él una cena navideña. Flores aseguró que estaba en buenas condiciones y que además “su lucidez le permitía opinar sobre la situación del país”. No obstante, el 31 de diciembre los parientes recibieron una llamada de la referida casa hogar en la que les notificaron que José López se había caído de la cama. El sábado 6 de enero una sobrina lo visitó y lo encontró amarrado en su camastro, con el rostro golpeado, las manos cortadas y con indicios de maltrato en la cabeza. “¿Cómo tenía todas esas heridas solo por caerse de la cama?”, se preguntó.

Familiares afirmaron que antes de ser trasladado a un CDI en El Paraíso, en el geriátrico les indicaron: “Digan que se cayó, no en nuestras instalaciones sino en su casa”. En ese CDI le suministraron suero y lo remitieron al Pérez Carreño. “Estuvimos nueve horas esperando a que lo atendieran”, señaló Flores. Como no recibió asistencia en ese centro, lo llevaron al Hospital Vargas donde les aseguraron que debían hacerle una tomografía debido a que el paciente convulsionaba, pero como en ese centro de salud no tenían como realizarle dichos exámenes, lo remitieron otra vez al Pérez Carreño. Sin embargo, José Antonio López, esperando ser atendido en una silla de ruedas de ese hospital, murió el 8 de enero en la tarde.

En el transcurso de ayer en la tarde se intentó contactar con la directiva de Geriatrix para conocer su versión acerca de este suceso, pero no atendieron las llamadas.


El geriátrico negó otros hechos

En 2015 la directiva del geriátrico recibió denuncias de  familiares y ex empleados de ese centro por presuntos maltratos a los ancianos que ahí cuidaban. También recibieron denuncias acerca de las condiciones en las que se encuentra la infraestructura del lugar, de acuerdo con reportes periodísticos. Ante estas acusaciones, ese mismo año Aurora Reyes, directora general de Geriatrix, aseguró que tales testimonios eran falsos, que su institución está adscrita al Seguro Social y que presta un buen servicio a sus clientes. Se desconoce si el Ministerio Público abrió una averiguación sobre esos hechos.