Fausto Masó: incierto 2016

Se fortalece el convencimiento de la mayoría de que se aproxima el final político de Maduro y del chavismo. Desaparecen los chavistas y nunca han existido los maduristas. La misma oposición rompe la unidad que solo logró forjar la necesidad electoral. Leopoldo López y Ramos Allup se abrazan a Un Nuevo Tiempo para arrinconar a Primero Justicia y apoderarse de la presidencia de la Asamblea. ¿Cómo queda Leopoldo López con esta alianza con el pasado? Ramos Allup logra darle vida a Acción Democrática, mientras a Voluntad Popular comprobará que no le conviene a largo plazo andar del brazo de los adecos.

El país político marcha por un camino mientras el país real sigue sumido en su tragedia cotidiana. Fallecen los venezolano por la falta de medicinas; enfermarse es aproximarse a la muerte, buscar desesperadamente por todo el país las medicinas para recuperar la salud.

Alexis Bello afirma en Twitter que han realizado su última operación cardíaca: “Por ahora, quizá mañana lleguen los insumos necesarios”.

Rafael Orihuela, ex ministro de Sanidad y Asistencia Social, lamentó por RCR que el gobierno no le esté dando la importancia debida a la amenaza del virus del zika.

El Miami Herald cuenta los casos increíbles de los venezolanos.

“Estaba muy contento porque le habían dicho que le habían encontrado un catéter de hemodiálisis y que ahora, posiblemente el lunes o el martes, le aplicarían la diálisis”, narró César Rosales, un proveedor de equipos médicos que por varios días trató infructuosamente de conseguirle el pequeño dispositivo, de costo menor a los tres dólares. “Estamos en una situación sumamente grave. Esto se ha agudizado muchísimo”, advirtió desde Caracas Freddy Ceballos, presidente de la Federación Farmacéutica Venezolana. “Es impresionante las fallas que tenemos en la disponibilidad de productos de hipertensión arterial, los anticonvulsivantes, los anticonceptivos, los productos para el asma. En una situación realmente crítica”. ¿Qué dice el gobierno? Repite que las medicinas llegarán la próxima semana. Puro cuento. La gente sigue muriéndose.

Ah, “la culpa la tiene el rentismo petrolero”, dice ahora el chavismo. La misma excusa que se repitió durante los gobiernos civiles, porque en cierta forma a ratos el chavismo es el peor gobierno posible de la IV República, una versión desgraciada de los vicios del pasado. A Venezuela la consume el tedio, el chavismo no está terminando trágicamente, sino en el peor ridículo.

Como ya se dijo al comienzo, Maduro y el chavismo carecen de futuro, nadie apuesta por ellos ni nadie tiene fe en el futuro inmediato de Venezuela, pareciera que todos tenemos los días contados. NO hay futuro en Venezuela, o no hay futuro para esta generación. Quizá surja gente nueva, los milagros ocurren. Por ahora la oposición se dividió después de su victoria electoral, como lo habíamos anunciado en estas crónicas. Se unieron sin contar con un programa, un plan, solo para ganar las elecciones, no pasaron de ahí, de una alianza electoral.

Urgentemente el país necesita imaginar un nuevo futuro, no seguir deslizándose indolentemente hacia ninguna parte, reconocer los dilemas que enfrenta y darse cuenta de que más allá de Nicolás Maduro Venezuela necesita una respuesta, una forma de superar el agotado rentismo petrolero, mientras nos amenaza el hambre este año en medio de la indolencia oficial. Nunca en América Latina ha habido un gobierno tan inepto, solo nos queda el consuelo de que si el país cambia será para mejor, porque peor no puede estar.