El estremecedor artículo de Alejandro Rodriguez Rosales

VIENDO EL DECRETO DE EMERGENCIA ECONÓMICA, SACO ALGUNAS CONCLUSIONES:

1) Estamos mal. Muy pero muy mal. No es juego de carrito lo que se viene. Quien desee verlo como chiste, pues que lo vea. Pero NO HAY DÓLARES, NO HAY PRODUCCIÓN y estamos sencillamente en un rumbo incierto.

2) Cerrarán el flujo de dólares para viajes, recreación y demás cosas no necesarias. No más SICAD ni mucho menos SIMADI. Buscan alguna forma para asumir compromisos de deuda con aerolineas y se apuesta quedarse sólo con Conviasa en materia de vuelos internos.

3) La escasez se profundizará hasta niveles insospechados. Hasta lo más bajo de lo que se haya podido uno imaginar. El acceso a los alimentos será cada dia peor. Dificulto que los bachaqueros puedan hacer algo, puesto que el estancamiento productivo más el excesivo control del Estado llevará a la economía a un estado enfermizo.

4) Todo ello se traduce en el aumento de la pobreza. Ya no habrá ni clase media baja, ni alta, ni media media ni nada. Sólo existirán dos clases: EL ESTADO, dueño de los recursos, y la GENTE, dueña de nada

5) Los precios del petróleo NO SE VAN A RECUPERAR. Pese a que vean ligeras alzas, siempre tenderán hacia la baja, hasta que alcance su suelo 5-7 dólares por barril. Esto no afectará a TODOS los países productores, sino aquellos que dependan únicamente del petróleo (Venezuela). Arabia Saudita es la que está generando todo este clima, con el único fin de afectar Rusia. No le importa ni la OPEP, ni mucho menos las alianzas establecidas.

6) Necesariamente, debemos dejar las divisiones políticas y la crispación. Es el momento de que el gobierno entienda que necesita lo mejor que puede haber en la oposición, y que la oposición también entienda que el gobierno necesita ayuda. Sé que es difícil pensar esto. Sobre todo, cuando hay tanta polarización.

7) Traten de pagar sus tarjetas de crédito y salir de ellas. El crédito en Venezuela, con altos niveles de endeudamiento de complicaciones económicas terminará por consumir lo poco que ganen los venezolanos. Reduzcan gastos (aun más de lo que hayan reducido). No es la hora de lujitos ni nada de esas cosas. Esto va, para los que sienten que esto que se viene NO LOS VA A AFECTAR.

8) Busquen la forma y la manera de tener TODOS sus documentos en regla. Tanto los suyos, como de sus hijos y parientes (cédulas, partidas de nacimiento, permisos, constancias de trabajo y de residencia, pasaportes, visas… Si no la tienen, vayan solicitándola), apostilla de títulos, certificaciones, informes médicos con sus tratamientos) ESTO ES DE VITAL IMPORTANCIA

9) Vuelvo y repito, SI TIENEN DÓLARES, NO LOS VENDAN, BAJO NINGÚN MOTIVO O CONCEPTO. El valor depreciativo del bolívar cada vez será menor, al punto que no es descabellado que se tenga que dolarizar en el corto-mediano plazo parte de la economía nacional.

10) Proteja su hogar. Inste a sus hijos, u amigos que se mantengan en comunicación. Y es importante llegar temprano. Para los menores de edad, NO SE LAS DEN DE ADULTOS. Anden con sus amigos y generen redes. Señores, TOMEN EN SERIO lo que se viene. Esto no es alarmar por alarmar. Ni generar ansiedad. Ni falsas expectativas. Lo que se viene es una VENEZUELA que nadie ha visto. Una Venezuela que ni siquiera se vio entre 1830 y 1999.

Un abrazo, y que Dios (para los que creemos) nos de la sabiduría para afrontar todo este apocalipsis que se le viene a Venezuela.

Un abrazo,

Arvin Alejandro Rodriguez Rosales

Internacionalista UCV
Profesor Universitario