Carta de un venezolano a la ministra de Salud

La contundente carta:

Buenos días Dra. Melo, quizá jamás se enterará de estas líneas que le escribo, quizás como yo, existen muchas personas que le han escrito sin que, ni usted ni su equipo, se hayan enterado, sin embargo tomo la redacción de esta carta como una oportunidad para drenar y expresar la impotencia y frustración que siento junto a mi familia de no poder encontrar la medicina del tratamiento del cáncer de mi madre. Pero antes de llegar a eso, me permito realizar un par de reflexiones.

Sra. Ministro, usted recientemente declaró en la ciudad de Guanare, que “los venezolanos somos los que consumimos en la región el mayor número de medicamentos per cápita” y también aseguró que los índices de escasez actuales hablan “del uso no racional de los medicamentos”, a lo cual quisiera comentarle, respecto a la primera afirmación: el consumo de medicamentos es directamente proporcional al estado de salud de la persona, si su afirmación es cierta, se entiende entonces que los venezolanos somos la población con el estado de salud mas deteriorado de la región, lo cual probablemente es cierto, solo basta con ver la cantidad de personas que asisten a una emergencia, o ver con alarma el brote del virus Zika en las ultimas semanas, el cual ya supera los 400.000 casos en el país, (cifra extraoficial, pues dudo que lleguemos a saber las cifras oficiales desde su despacho).

Por otro lado me pregunto, Sra. Ministro, ¿Cómo yo decido tomarme un analgésico si no me duele nada?, o ¿Cómo decido tomarme un antialérgico si no lo necesito?, con lo que llego a su segunda afirmación y le pregunto ¿Cómo se entiende un “uso irracional de los medicamentos”?

Considero, con todo el respeto que su envestidura merece, una inmoralidad y falta de respeto al venezolano sus declaraciones respecto al uso irracional de medicamentos, y es ofensivo, Sra. Ministro, que mientras mis hermanos y yo no descansamos todos los santos días en buscar y buscar, de realizar innumerables llamadas a fundaciones y farmacias de medicinas de alto costo, sin tener ningún éxito, tengamos que escuchar ese tipo de declaraciones de quien esperamos tenga alguna propuesta, solución o plan de acción para empezar a solventar esta escasez que hoy nos agobia.

Dicho esto le comento, mi madre es paciente de cáncer de mama, recientemente sometida a cirugía de mastectomía radical, cumpliendo un tratamiento de Exemestane (Aromasin) 25mg, desde la detección del cáncer en Junio 2015. Este tratamiento hormonal antineoplásico es el que permite la no propagación de la enfermedad a los nódulos linfáticos y evitar así metástasis en el organismo.

Le comento que este tratamiento en condiciones normales, podría encontrarse en banco de drogas (privados) o en farmacias de medicinas de alto costo en cualquier IVSS del país. La última vez que el IVSS tuvo disponibilidad del medicamento para mi madre fue en Octubre de 2015, lo cual nos permitió solventar hasta el mes de Noviembre, para ese entonces gracias a una donación de una empresa privada, pudimos cubrir el mes de Diciembre, pero ya en el mes de Enero, Sra. Ministra, volvemos a la búsqueda que lamentablemente en esta ocasión no ha sido exitosa.

Se que como nuestra familia, son miles y miles que viven esta situación, no tan solo con el Aromasin, sino con otras medicinas de alto costo, y quizás sea pretencioso en considerar el caso de mi madre sobre otros, pero estoy seguro que cualquier ser humano lo haría. Mi madre lo es todo para mi y mis hermanos, y ver que esta pasando por esta situación sin lamentablemente poder ayudarla, crea un sentimiento de dolor, impotencia, frustración y rabia que lamentablemente, Sra. Ministro Ud. no ve ni entiende, es un sentimiento masivo, la población venezolana grita desesperadamente por medicamentos,porque nos estamos muriendo!

Sí, suena muy dramático pero es real, aquí solo esperamos nuestro momento, porque si no nos mata un malandro, nos mata una enfermedad. Solo espero y pido a Dios que reflexione, y que si algún día llega a leer estas líneas que le escribo, sean útiles para su conciencia.

Sra. Ministro, en sus manos está la vida de muchos venezolanos, tiene frente a Ud. una oportunidad histórica de hacerlo bien, y pido a Dios que le cuide para que nunca, ni Ud. ni alguno de sus cercanos, pase por esta situación de una enfermedad crítica y sienta el dolor que sentimos millones de venezolanos que no contamos con un tratamiento necesario para vivir.

Mi nombre es Ramón Pastor Rojas, mi C.I. 15.666.614, y soy responsable de cada letra que se lee en esta carta.

 

Muchas Gracias
FB: pastorjam
Twitter: @pastorjam
IG: @pastorjam