Los falsos autonombrados hijos de Chávez que están en el gobierno y sus amigos conectados con el gobierno están destruyendo su legado. Lo que le costó al Comandante Chávez construir en dos décadas, estos lo están derrumbando en apenas dos años y medio. Desde aquel 8 de diciembre de 2012, en su histórico discurso dirigido a la nación, se inició el proceso de erosión de su legado y en consecuencia la destrucción progresiva del proceso revolucionario.
Después de aquellas proféticas palabras del comandante Chávez, y cito “Pero yo quiero decir algo, quiero decir algo, aunque suene duro, pero yo quiero y debo decirlo, debo decirlo. Si como dice la Constitución, cómo es que dice, si se presentara alguna circunstancia sobrevenida, así dice la Constitución, que a mí me inhabilite, óigaseme bien, para continuar al frente de la Presidencia de la República Bolivariana de Venezuela, bien sea para terminar, en los pocos días que quedan” …..”Y sobre todo para asumir el nuevo período para el cual fui electo por ustedes, por la gran mayoría de ustedes, si algo ocurriera, repito, que me inhabilitara de alguna manera, Nicolás Maduro no sólo en esa situación debe concluir, como manda la Constitución, el período; sino que mi opinión firme, plena como la luna llena, irrevocable, absoluta, total, es que —en ese escenario que obligaría a convocar como manda la Constitución de nuevo a elecciones presidenciales— ustedes elijan a Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela”, no tengo dudas que se inició el proceso de depredación de las divisas de la nación. Muchos pensaron que hasta aquí llegaba la Revolución Bolivariana, e iniciaron el descarado proceso de saqueo de nuestras reservas y de la retan petrolera, lo cual sin lugar a dudas es la principal causa del deterioro económico de los dos últimos años (dicen que se fugaron entre 25.000 y 250.000 millones de dólares), lo del bajón de los precios del petróleo es una causa secundaria y menos impactante (viviendo con austeridad podemos sobrellevar la situación).
La situación del país es verdaderamente grave, todos los ciudadanos lo sienten, lo perciben, la sufren, lo saben, lo comentan, menos el gobierno que insiste en no ver la gravedad y lo que es peor, de no reconocer públicamente este problema, se limita a culpar a todos los demás, menos a ellos, los que han conducido las riendas del gobierno. Pareciera que todos los miembros del gobierno sufren de un autismo colectivo, no se escuchan voces disidentes que alerten de su autoengaño, que los despierten de la somnolencia que produce el poder.
La crítica y autocrítica, en la cual creía tanto el comandante, se les olvidó a los más fieles aliados comunicacionales del gobierno, como por ejemplo los muchachos de Zurda Conducta, Pérez Pirela, José Vicente Rangel, Los Robertos, ente muchísimos otros y hasta el mismísimo Mario Silva, quien tubo los testículos bien puesto, cuando se atrevió a decir, en privado, lo que dijo en aquel audio famoso que quedo en el olvido, todos son cómplices silentes al no decir nada, con su silencio están mandando un mensaje de que todo va bien o que no hay porque alarmarse, y la realidad es otra, no se trata de tirarle al gobierno o de ser contra-revolucionario, se trata de “Gritar” al oído del gobierno para que reciban un sacudón e inicie una operación de salvamento urgente para evitar la caída por el despeñadero, al cual estamos todos condenados, de no darse un verdadero Golpe de Timón.
Parece mentira, pero las mismas causas que dieron al traste con la cuarta república pudieran dar al traste con la quinta república, se sustituyó el pacto de punto fijo por el pacto cívico-militar, que ha sido muy efectivo para reducir la posibilidad de una ruptura constitucional, pero se ha comprobado, con hechos, la patética ineficiencia demostrada por la gran mayoría de militares (salvo honrosas excepciones) con responsabilidades en el gobierno, en todos los cargos, desde un ministerio hasta en cualquier cargo medio en un órgano o ente del estado. Han dado al traste con el eslogan «Eficiencia o Nada». Y los pocos civiles en funciones de alta dirección en el gobierno son tan o más ineficientes que los militares.
En sus discursos los principales y altos líderes de la revolución nos piden a nosotros (al pueblo) lealtad con la revolución, lealtad con el comandante Chávez, invocan a la conciencia, pero se olvidan de pedirle lo mismo a todos los que ejercen funciones de gobierno, y en especial a los ministros, a los diputados, a los gobernadores, a los alcaldes, a los concejales que supuestamente son aliados de la revolución o que son chavistas, quizás porque muchos no son verdaderos chavistas y ni socialistas, son puros oportunistas, disfrazados de izquierdistas, con trajes perfectos a la medida. Le piden sacrificios al pueblo mientras ellos muestran con el mayor desparpajo sus riquezas y los privilegios del poder, que inmoralidad.
Presidente Maduro cumpla con hacer UN VERDADERO SACUDON EN SU GOBIERNO y cambie a todos los ministros de su gabinete, sin excepción. Aunque usted no lo crea, Sr. Presidente, sus ministros con su ineficiencia e incapacidad, para resolver los problemas del pueblo, están dando al traste con el legado de Chávez, al crear las condiciones o permitir que se crearan las condiciones que nos tienen sumergidos en esta grave crisis social, moral y económica. Dé un Golpe de Timón y cambie lo que tenga que cambiar, castigue a los corruptos que se han enriquecidos en funciones de gobierno, que le están haciendo tanto daño y no le tema a las consecuencias, reconozca los errores cometidos, rectifique lo que tenga que rectificar, pida la ayuda que tenga que pedir, gobierne para todos los venezolanos, conviértase en el verdadero líder o estadista, que todo mundo está esperando, que nos saque de este atolladero, todavía está a tiempo Sr. Presidente, mañana es tarde.
Sr. Presidente le recuerdo algunas palabras del comandante Chávez en su toma de posesión del 2 de febrero de 1999, cito:…“En ese orden de ideas, para dar una señal de arranque inmediato en lo social no podemos esperar ni una hora, no hay sábado ni domingo para los que estamos en emergencia y tenemos tan gran responsabilidad, tan gigantesca responsabilidad, con tantos millones de seres humanos que en este mismo instante cuando estamos nosotros aquí, no tienen qué comer o no tienen escuela para ir o no tienen un parque para jugar o no tienen un techo para dormir en paz. Decía José Martí, el grande, cuando hablaba de los seres honrados “para ser honrado no basta sentir o decir que no se le hace daño a nadie”. No, eso no basta, para ser honrado de verdad un hombre, una mujer, un ser humano, si sabe que alguien está sufriendo cerca de él, tiene que hacer todo lo que él pueda para evitarle ese sufrimiento a ese ser humano, es la única forma de ser honrado, es más de ser cristiano pues porque la primera Ley de Dios dice así “ama a tu prójimo como a ti mismo”. Yo a veces me he atrevido a decir un juicio que yo recomendaría a esa primera Ley de Dios, que Dios me perdone: en este momento en emergencia nosotros los católicos y cristianos deberíamos decir más bien: “ama a tu prójimo más que a ti mismo” Así que para dar señales al respecto, está comenzando hoy una verdadera guerra contra esos males sociales, una verdadera batalla”.
¡Unidad, lucha, batalla y victoria! El mayor legado de Chávez para su pueblo