A Gustavo Enrique Oquendo lo interceptaron los sicarios ayer en la mañana cuando llegaba a una carnicería. Los detectives de la Policía científica, investigan su muerte. Se dice que uno de sus hijos es extorsionador y la pagaron con su padre. El año pasado le mataron a un sobrino en Maracaibo
De múltiples disparos asesinaron a Gustavo Enrique Oquendo Almarza, de 70 años, ayer a las 10.00 de la mañana, mientras estacionaba su vehículo frente a una carnicería, en la avenida 5, con calle 12, de Los Puertos de Altagracia, municipio Miranda.
La víctima estacionaba su vehículo modelo Cavalier, color dorado, placas AH658OG, cuando unos motorizados lo interceptaron y le dispararon hasta dejarlo sin vida. Funcionarios que patrullaban por las adyacencias del lugar intentaron dar con el paradero de los homicidas, pero no pudieron.
Fuentes ligadas a la investigación revelaron que era la primera vez que Oquendo Almarza sufría un atentado, sin embargo se conoció que hace unos meses intentaron extorsionarlo y se negó a pagar, por lo que lo tenían amenazado.
Otra de las versiones que trascendió es que uno de sus hijos es extorsionador y cobraron venganza con su padre. Oquendo Almarza era hermano del exalcalde de la localidad costeña Wilmer Oquedo, primo de un sicario apodado el «Koyak». A este el 27 de abril del año pasado a las 7.00 de la noche le asesinaron también a su hijo Carlos Javier Oquendo Ramos, de 34 años, dentro de su automóvil Chevrolet Cavalier vinotinto, en la avenida 14B con calle 85 Falcón de la parroquia Chiquinquirá de Maracaibo. Por su muerte culparon a David Alejandro Nava Silva, alias el “Cunaguaro” uno de los sicarios «mano derecha» de Tirso Meleán.
Los detectives de la Policía científica iniciaron las investigaciones e indagan el entorno de la víctima y si su muerte está relacionada con la de su sobrino. El cuerpo lo trasladaron hasta la morgue del Hospital General de Cabimas para practicarle la necropsia de ley.
Se conoció que en el lugar del crimen, los funcionarios del cuerpo detectivesco recolectaron más de seis casquillos de bala. Testigos aseguraron que Oquendo recibió al menos tres balazos en el rostro.
6 casquillos colectó la Policía alrededor del cadáver de Oquendo
La Verdad