Schemel: El captahuellas no funciona, sino la compra por número de cédula

El director de Hinterlaces, Oscar Schemel, afirmó este lunes que el Gobierno debe tomar acciones objetivas con el desabastecimiento y la formación de colas, “los venezolanos deben sentir que hay disposición a , lo que más genera malestar no es el desabastecimiento, es la incertidumbre. A mayor incertidumbre, más posibilidades de voto castigo”.

La afirmación la hizo este lunes durante su participación en el programa Vladimir a la 1 transmitido por Globovisión.

“El índice de abastecimiento al consumidor es una metodología nueva en la que no se mide el de venta si no el , porque hay muchas distorsiones, el punto de venta ya no te da la información sobre el abastecimiento”, afirmó en referencia a los indicadores tomados en cuenta para los estudios más recientes de la encuestadora.

“Ya no se trata de abastecer, si no de hacerlo asequibles, que tengan un precio tolerado por el consumidor”, indicó.

“El precio es vital. En algunos rubros nos está creciendo el número de venezolanos que no tiene el producto, no porque no lo haya conseguido, si mo porque no puede pagarlo (…) ya no solamente se trata de abastecer, de colocar el producto en los anaqueles, se trata de hacerlos asequibles. El gobierno tiene que reimpulsar el de social que está siendo golpeado por la guerra económica, por la especulación, por la inflación, por el bachaqueo, el contrabando de extracción (…) Es evidente que hay una guerra económica que busca neutorizar a la sociedad venezolana para provocar compras nerviosas”.

“Guayana (estado Bolívar) es la región más maltratada por el desabastecimiento y la escasez”, aseguró basado en los sondeos de Hinterlaces.

“Se mantiene el optimismo, la esperanza, es una condición muy propia del venezolano (..) pero han aumentado los sentimientos negativos y tiene que ver con la incertidumbre, el gobierno bolivariano tiene que restablecer la comunicación para mejorar la esperanza, garantizar certidumbre”, recalcó Schemel.

“Hay que colocar el foco en la producción de alimentos a buen precio”, insistió.

“Hay que reducir los niveles de incertidumbre que crean un clima de vulnerabilidad, de desprotección que afecta el clima emocional, de alguna manera la percepción del futuro es muy negativa”, afirmó.

“La guerra psicosocial tiene como objetivo crear neurosis para buscar salidas violentas”, indicó.

Schemel sostuvo que solo un 37% de la población cree en la tesis de la guerra económica que han argumentado el gobierno.

“El foco debe colocarse en la producción y los índices de precios”, subrayó.

“El captahuellas no funciona, más funciona la compra por número de cédula”, dijo en referencia a los mecanismos que se han venido aplicando para la compra de productos regulados.

La correlación de fuerza se inclina a favor del descontento. “El descontento es el principal partido de oposición, la oposición lo que hace es recoger el voto neurótico, ese voto del malestar, de la insatisfacción, hay un sector que como consecuencia de la insatisfacción vota en contra sin importar lo que pueda pasar al día siguiente, no vota a favor de alguien, la oposición no es alternativa”.

“Esta es una revolución que todos los años se pone a prueba en las urnas electorales (..) Cerca del 60% de los venezolanos prefiere que el gobierno resuelva, “es mentira que el chavismo está derrotado”, expresó con relación a las posibilidades del oficialismo en recuperar la popularidad.

Dijo que “la comunicación es vital en este proceso de reimpulso de la revolución”.

Los problemas económicos preocupan a ocho de cada diez venezolanos, advirtió.

Desabastecimiento, inflación e inseguridad son los tres principales problemas que preocupan a los venezolanos, manifestó. “Si hay un vacío en el tema económico lo empiezan a llenar otros discursos”.

Sobre las medidas económicas a ser tomadas, Schemel indicó que el incremento de la gasolina es una de ellas. “El 60% de los venezolanos está de acuerdo, sabe que la gasolina se está regalando”, dijo.

“La peor debilidad de la oposición es no tener un mensaje, una narrativa”.

Fuente: Panorama