Evite ser víctima de extorsiones en el Aeropuerto de Maiquetía: Lo que es legal y lo que no

“La ignorancia es la mejor arma del funcionario que martilla“. Con esta frase, un especialista en materia de seguridad y actuación policial, con más de 20 años de experiencia y que trabaja actualmente para un cuerpo de policía municipal, resume el aumento de extorsionesque se reportan de manera informal en el Aeropuerto Internacional Simón Bolívar, en Maiquetía estado Vargas.

Las redes sociales han sido la plataforma en la que proliferan las denuncias de cientos de venezolanos que desde 2016, aproximadamente, comenzaron a informar que funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) se han convertido en sus victimarios o en los de sus conocidos.

Federico Gómez es ingeniero químico y tiene 27 años de edad. En agosto de 2016 abrazó por última vez a sus padres en el aeropuerto de Maiquetía, lloró en sus hombros, y entró a migración. Allí, la GNB, también lo despidió.

“Cuando pasé los rayos X, un guardia me revisó el bolso de mano y la cartera. Vio que tenía 600$ en efectivo y me preguntó que si no traía la certificación de Cadivi (Comisión de Administración de Divisas, actualmente Centro Nacional de Comercio Exterior). Le dije que no. Me puse nervioso, porque no sabía de ese papel. El guardia me dijo que eso era un delito de legitimación de capitales y que si no quería que me metiera preso, le diera un billete. Eran billetes de $ 100. Le dejé uno y me fui”, contó quien emigró a Hungría.

Federico no le contó a nadie de cómo la GNB lo extorsionó. Tampoco dijo nada de la bandera que tuvo que dejarle a los mismos funcionarios, pues se la pidieron “la gorra o la bandera” como parte del pago para no ser privado de libertad. “No quise que la gente me llamara pendejo. Creo que se aprovecharan de ese momento vulnerable. Uno está triste por dejar a su familia, está angustiado por cómo será vivir en un país y asustado por lo que vayan a hacerte los funcionarios”, expresó.

Esto fue lo que señaló Cipriana Ramos, especialista en materia aduanera de Consecomercio, quien recordó que el nerviosismo es una sensación típica en un aeropuerto. “En Venezuela, hasta tienes miedo de los guardias. Leí que incluso quieren romperte el título universitariosino les pagas. Lo importante es saber que puedes llevar contigo hasta $ 10.000 sin hacer el registro en Cencoex“, aseguró la especialista.

Así como el joven ingeniero, Alejandra Moreno, licenciada en idiomas de 29 años, tampoco denunció. A ella la quisieron despojar de sus joyas con la excusa de que el oro es un bien de la nación. Los uniformados la vieron ingresar el 16 de octubre de este año a migración sola, y pensaron que podrían aprovecharse de ella.

“Se dieron cuenta de que yo tenía una caja con anillos de oro, me paran y me dicen que abra la cartera. Me revisan donde tenían las joyas y me dicen: ‘esto no es fantasía y usted sabe que no se puede sacar los bienes del Estado’.  Lo único que pude decir de los nervios es que eso era mío, que no era del Estado, pero ellos me dijeron que como el oro es hecho aquí en Venezuela, no se podía sacar”, narró Alejandra.

Los militares la amenazaron con pasarla “al cuarto” y le pidieron el pasaporte. Allí es cuando se dan cuenta que no está sola, sino con su mamá. Deciden pasar la caja de prendas por los rayos X y le anuncian que dio negativo. “No sé qué quiso decir con eso, pero me dejaron ir sin quitarme nada”, aseguró.

La realidad

“Si no conoces la legislación, haces lo que ellos dicen. Es importante que la gente conozca sus derechos para que así puedan estar seguro y mostrar propiedad cuando se nieguen a sermatraqueados o martillados (término coloquial para llamar a la extorsión). Les dices que ese dinero es tuyo, o que los artículos son de uso personal y que te puedes llevar joyas donde quieras porque no son material estratégico“, recomendó el especialista en materia de seguridad.

José Luis Baraona no corrió con la suerte de Alejandra. Él fue detenido el 1 de agosto de este año por funcionarios de la GNB, quienes le vieron nueve piezas de oro entre sus pertenencias y lo señalaron por “tráfico de materiales estratégicos”.

Según el diario El Mundo, este caso quedó signado con el número de expediente WP02-P-2017-004093, donde consta como el hombre fue presentado no solo ante el Ministerio Público, sino también ante el Tribunal 5° Municipal de Vargas, donde fue imputado por contrabando simple y puesto en libertad; es decir, que se abriría una investigación penal en su contra.

Sin embargo, la Corte de Apelaciones local anuló tal decisión luego de señalar que solo la autoridad aduanera tiene facultad para determinar que una mercancía es restringida.

Además, aseveró que las piezas de oro que portaba el detenido “no son bienes de utilidad pública sino bienes personales”. La Corte le dio la libertad plena, es decir no habrá investigación en su contra.

Tanto Ramos, como el especialista en actuación policial, como el abogado penalista José Sánchez Morante, aseguran que traer al país productos para uso personal como electrónicos, alimentos, ropa u otros bienes no constituye un delito. Aclararon que incluso no declararlos en el Formulario de Registro y Declaración de Aduanas para Equipaje (Forma 82) es una falta que conlleva a una sanción.

“Cuando alguien infunde terror o estado de alarma a una persona a cambio de una contraprestación en beneficio propio o tercera persona sí se está configurando el delito de extorsión”, apuntó Sánchez Morante.

Este delito está tipificado en el Código Penal en el artículo 459. En él se establece que la pena para quien lo cometa será de cuatro a ocho años de prisión. Además en el artículo 16 de la Ley Contra el Secuestro y la Extorsión se establece como pena para la extorsión entre 10 y 15 años de cárcel.

¿Dónde denuncio?

Para realizar este trabajo, Efecto Cocuyo llamó al 0 8000 736428, número que ofrece el Servicio Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) en su página web para atención al ciudadano.

Después de preguntar sobre los impuestos que se deben cancelar al ingresar mercancía nueva al país, la cual se considera equipaje personal, se le preguntó al operador sobre cuál es la cantidad exacta que la aduana considera como productos para la comercialización. “Eso depende. En el aeropuerto tienen una tabla donde se especifica esto. Pero usted no puede traer tres teléfonos celulares o tres perfumes, porque eso ya sería para vender. Bueno, al menos que usted demuestre que son para regalar“, explicó.

Recordó que es importante que los pasajeros guarden las facturas de los productos nuevos y que hagan la declaración en la Forma 82. No hacerlo acarrea el pago de multas, pero no una detención. “Estos pagos se hacen directamente en un banco que se encuentra en el área de inmigración en el aeropuerto y ese dinero va al Tesoro de la Nación“, especificó.

Sobre en dónde denunciar en caso de ser víctimas de extorsión, el funcionario al teléfono manifestó que el pasajero debe dirigirse hacia los funcionarios de la GNB. En caso de que los victimarios sean los militares, recomendó acudir a los trabajadores del Seniat u otro cuerpo policial que se encuentre en el aeropuerto.

La principal entrada y salida aérea del país, además de ser vigilada por la GNB, cuenta con comisiones de la Policía Internacional (Interpol), el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin),  Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), Seguridad Aeroportuaria y desde hace dos años con uniformados de la Policía Nacional Bolivariana (PNB).

Fabiola Yeret Conde Baptista, funcionaria de Seguridad Aeroportuaria, fue imputada el 14 de septiembre por el delito de extorsión en el Tribunal 5° Municipal de Vargas. Al parecer ella le solicitó a un pasajero la cantidad de 100 dólares.

El 11 de septiembre, la víctima fue revisada por la funcionaria. Ella vio que traía artículos de higiene personal, dos celulares y dinero en moneda extranjera. Le informó al pasajero que no podía pasar con esos productos y que debía someterse a un procedimiento que le demoraría tres horas, lo que le impediría abordar el avión.

La funcionaria le pidió 100 dólares en efectivo para permitirle su partida por el terminal aéreo y la víctima accedió a la propuesta.

La víctima denunció la situación a los militares de la GNB, quienes procedieron a detener a Conde Baptista y presentarla ante el Ministerio Público, publicó Efecto Cocuyo

(noticiasaldiayalahora.co)