Los empujones y gritos, además de ser “normales” en las colas para adquirir productos escasos a precios regulados, ya no significan nada para muchos.
Las agresiones ahora son peores. Hay mordiscos, puñetazos, patadas y hasta machetazos.
Entre el 15 de agosto y lo que va de octubre, dos personas han perdido la vida en la zona norte de Anzoátegui, por sufrir ataques al corazón, mientras estaban en las filas de los supermercados. Así lo publicó El Tiempo.
El último caso que se registró en el estado fue el de Yean Paúl Asfar Fermín, de 52 años.
El pasado sábado estaba en el Abasto Bicentenario, ubicado en la avenida Intercomunal Jorge Rodríguez de Barcelona, cuando, supuestamente, una mujer quiso “meter” a un conocido en la cola delante de ella.
Esa fue la versión de varios testigos, quienes aseguraron que Asfar empezó a discutir con la ciudadana. Aparentemente, la fémina le respondió que desde temprano le cuidaba el puesto a su amigo.
Cuando la disputa subió de tono, el hombre empezó a sentirse mal y se desplomó. De inmediato, lo trasladaron al hospital Domingo Guzmán Lander de Las Garzas, pero ingresó sin signos vitales. Murió a causa de un infarto.
Terquedad
La esposa de Armando José Ocanto Valladares no paraba de llorar el pasado 15 de agosto.
Entre lágrimas dijo que siempre le reclamaba a su “viejo” por pasar malos ratos en las colas. Le decía que dejara de estar comprando.
Ese día, el comisario jubilado de la Policía del estado Anzoátegui (Polianzoátegui) se puso a pelear con unos supuestos bachaqueros que quisieron colearse, mientras él hacía una larga fila en el estacionamiento de la tienda Makro de Puerto La Cruz. En medio del altercado sufrió un ataque al corazón.
Funcionarios de Protección Civil (PC) del municipio Sotillo llevaron a Ocanto a la emergencia del hospital Universitario Luis Razetti de Barcelona, pero fue demasiado tarde.
Aunque trataron de reanimarlo, el esfuerzo fue en vano.
SuNoticiero