El cadáver del venezolano Rafael Martínez Agüero fue retirado este fin de semana por su madre en el Instituto de Medicina Legal en Cúcuta, Colombia.
El joven de 25 años, fue hallado con un tiro en la sien al margen del río Táchira, en toda la línea fronteriza que separa a Villa del Rosario de San Antonio del Táchira, el pasado 23 de diciembre. Según reseñó La Opinión, El cuerpo no había sido identificado. La madre se enteró por la prensa de lo ocurrido y viajó hasta el vecino país para hacer las diligencias pertinentes.
La dama explicó que el 7 de diciembre Rafael decidió empacar unas cuantas pertenencias y tomó camino a Colombia. Primero estaría en Cúcuta, donde trabajaría vendiendo productos venezolanos para ahorrar dinero. La meta era que con los pesos que recogiera continuaría su camino hacia Medellín o Bogotá, donde lo esperaban unos amigos.
Desde el 7 de diciembre hasta el 23, madre e hijo intercambiaron cuatro llamadas, en las cuales el joven siempre le manifestó a su familia que se encontraba bien. Las autoridades afirmaron que a la víctima le cubrieron el rostro con su misma camisa antes de matarlo.
El comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, coronel Javier Barrera, dijo que por razones humanitarias sus hombres recogieron el cuerpo, porque según coordenadas estaba más hacia el territorio venezolano. Familiares manifestaron que su muerte pudo ser producto de una equivocación y fue confundido posiblemente por las bandas criminales que ejercen control territorial en la frontera.
(noticiasaldiayalahora.co)