Lo que dijo Alejandro Andrade frente a la Corte Federal de EE.UU

Alejandro Andrade

Con una sentencia de 10 años en la cárcel, para Alejandro “El Tuerto” Andrade, por el delito de lavado de dinero, juzgado por la Corte Federal de lo Estados Unidos (EEUU).

El tuerto se declaró culpable ante la corte por el lavado de dinero de mil millones de dólares de la empresa Petróleos de Venezuela, además leyó una carta y pidiendo el perdón de su familia y amigos, pero no a los venezolanos.

Los detalles de lo que ocurrió en la Corte Federal de EEUU, a continuación:

«Acaban de sentenciar a 10 años de prisión a Alejandro Andrade en la corte del sur de Florida (Palm Beach). Leyó una carta y pidió perdón a su familia y amigos, no precisó si a los venezolanos.»

Así lució Andrade en el tribunal:

.

 

«Luego de esos 10 años de prisión, Andrade entrará en un proceso de “liberación supervisada” hasta que se decida su deportación o estatus migratorio. Tiene 90 días (3 meses) antes de entrar a prisión (aún no definido el lugar donde la cumplirá).»

«La defensa reveló que Andrade vino a EEUU en 2014 con un “parole” (permiso especial de entrada) y desde entonces se porta muy bien dándole informacióna las autoridades. Andrade avaló el trato que le ha dado la justicia en EEUU.»

«Andrade: “Buenos días, su Señoría. Deseo pedir perdón… asumo con plena responsabilidad los hechos por los que me he declarado culpable… he ayudado al pueblo de Venezuela en estos 10 años…” (dijo que después dirá detalles»

«Andrade en la corte: “como tesorero tomé decisiones muy desacertadas que hoy lamento con todo corazón”.»

«Andrade en la corte estuvo sin esposas, vestía pantalón caqui, saco azul marino, corbata azul cobalto, mocasines marrones y unos lentes de pasta negros. El pelo completamente rapado. Insitió en saludar a los presentes y les daba la mano.»

«Carlos Vechio, de Voluntad Popular, se le acercó en la corte y le recordó a Alejandro Andrade “el daño tan grande que le has hecho a Venezuela”. Andrade dio un paso atrás y el abogado trató de disolver el encuentro.»

«Dos bancos detrás de Andrade estaban tres mujeres de su familia, no estaba el jinete, su hijo Emanuel Andrade. Una de ellas tomaba nota de todo. Salieron huyendo de las preguntas de los periodistas.»