La selfie de Macron que encendió las redes sociales

macron

El presidente de francés, Emmanuel Macron, ha desatado una nueva polémica, luego de que apareciera en una fotografía con dos jóvenes afrodecendientes en las antillas francesas y uno de ellos realizara una denominada “peineta”.

El gesto ofensivo del joven, causó revuelo en toda Francia para criticar al mandatario, mientras que sus detractores lo calificaron como “poco presidencial”, según reseñó el diario El Mundo.

“No encontramos palabras para expresar nuestra indignación. Francia no se merece sin duda alguna esto. Es imperdonable”, escribió una de las mayores detractoras del gobernante francés Marine Le Pen, presidenta de Reagrupación Nacional (antiguo Frente Nacional) en Twitter, compartiendo la polémica fotografía en esta red social.

La visita de Macron a la isla no estaba prevista al igual que la fotografía, el mandatario solo se resguardaba de la lluvia en las afueras de un edificio, donde pudo conversar con vecinos de la comunidad.

El presidente habló durante la visita con el joven delincuente. “Soy atracador, salgo de prisión”, le explicó el joven en un vídeo difundido por el Palacio del Elíseo. Macron le sermoneó: “Hace falta trabajo para reconstruir. Los jóvenes como tú… Tú estás cachas, hace falta que trabajes en esto. No puedes continuar así y no puedes volver a hacer tonterías. Los robos, se acabó. Lo has dicho. No lo olvides. Tu madre merece algo mejor”, le dijo el presidente al joven en presencia de su madre.

Sin embargo, las criticas por la captura no dejaron de llegar.

“La función está cada vez más dañada por los desesperados golpes de comunicación de Macron. Francia merece algo más que este ‘music hall’ presidencial“, escribió en Twitter Gilbert Collard, diputado del partido de extrema derecha Reagrupación Nacional.

“Debes comportarte como es debido, no me llames Manu, llámame señor presidente”, dijo con ironía Valérie Boyer, diputada del partido conservador Los Republicanos, compartiendo la fotografía del presidente con los dos jóvenes.

No obstante, Macron trató de arreglar el asunto, aseverando que “ama a cada niño de la República, sean cuales sean las tonterías que haya hecho“. El mandatario también dijo que “hay que dejar de pensar” que los jóvenes porque son “de un cierto color o en un momento han hecho tonterías”, no puedan aprender de sus errores. Macron explicó que el joven que hizo el gesto ofensivo con el dedo estudia formación profesional y que el otro busca empleo tras salir de prisión.   reseña Sumarium