Jair Bolsonaro será operado nuevamente este lunes

Bolsonaro

La tragedia causada por la rotura de un dique de desechos minerales en Brumadinho no modificó por ahora los planes del presidente Jair Bolsonaro de someterse a una cirugía el lunes para que se le retire la bolsa de colostomía que usa desde que sufrió en un atentado con cuchillo en plena campaña electoral.

Según confirmó el vocero presidencial, Otávio Rêgo Barros, el mandatario solo transferirá el poder a su vicepresidente, el general Hamilton Mourão, durante las primeras 48 horas después de la operación.

Luego, Bolsonaro tiene planeado trabajar desde el hospital por los 10 días que se estima demorará la recuperación, para lo que se montará una sala especial donde podrá recibir a sus ministros, una suerte de extensión de su despacho en el Palacio del Planalto.

De acuerdo a información brindada por el vocero, el presidente, que esta mañana sobrevolará la zona afectada en Brumadinho, viajará a San Pablo mañana por la mañana para internarse en el hospital Albert Einstein y realizarse unos estudios prequirúrgicos.

El médico Antonio Luiz Macedo, quien comandará el equipo que lo operará, indicó que el procedimiento se efectuará el lunes temprano durará entre tres y cuatro horas.

«Está todo bien con él, todo perfecto. Cuando terminemos la cirugía podremos emitir un boletín para explicar cuántos días demorará la recuperación. Depende mucho de cómo sea la operación, no hay nada previsible», explicó.

El ataque
El 6 de septiembre, mientras participaba de una manifestación callejera en Juiz de Fora, Minas Gerais, Bolsonaro, de 63 años, fue apuñalado en el abdomen por Adelio Bispo de Oliveira, quien fue preso y luego declaró que había actuado «por órdenes de Dios».

La investigación del caso, a cargo del Ministerio Público Federal, sigue en curso para determinar la salud mental del agresor, dilucidar quién pagó por su defensa, y si alguna organización criminal o grupo político estuvo detrás del ataque. Se espera que los resultados estén listos en los próximos tres meses.

Inmediatamente después del atentado, Bolsonaro fue atendido en la Santa Casa de la Misericordia de Juiz de Fora, donde fue operado por primera vez. La cuchillada lesionó una vena que provocó una gran hemorragia y daños en los intestinos grueso y delgado, por lo que se le colocó una bolsa de colostomía para derivar y juntar sus materias fecales.

Al día siguiente fue trasladado al hospital paulistano Albert Einstein, y el 12 de septiembre fue sometido allí a una segunda cirugía de emergencia para desobstruir una adherencia de las paredes intestinales. El 29 de septiembre, tras 23 días de internaciones, recibió el alta.

Debido a su estado de salud, Bolsonaro ya no participó de los debates televisivos entre los otros candidatos presidenciales y su popularidad aumentó. Continuó haciendo campaña desde su casa en Río de Janeiro a través de las redes sociales y finalmente ganó las elecciones en octubre.

Aunque desde que asumió la presidencia, el 1º de enero, Bolsonaro ya dejó el poder en manos de Mourão para viajar a Davos, Suiza, donde entre el lunes y el jueves último participó del Foro Económico Mundial, para la operación había optado originalmente solo transferir las funciones ejecutivas durante las horas en que durara la cirugía, cuando estará inconsciente.

La decisión causó cierto malestar entre los sectores militares que integran el gobierno y, tras recomendación médica, el presidente se convenció de ampliar el plazo solamente a las primeras 48 horas. Indicó que quiere seguir con atención el desarrollo de la tragedia en Brumadinho y dar órdenes, reseña Diario La Nación