Estaba en manos del Ministerio de Hacienda desde septiembre de 2017 para evitar que dinero público se gastara en promocionar la independencia de esa región española
El nuevo Gobierno español, en su primera reunión, decidió este viernes levantar la supervisión sobre las cuentas del Ejecutivo regional de Cataluña, en manos del Ministerio de Hacienda desde septiembre de 2017 para evitar que dinero público se gastara en promocionar la independencia de esa región española.
La portavoz del Ejecutivo, Isabel Celaá, avanzó en rueda de prensa que esta decisión se tomó como gesto de «normalidad política» y con la confianza de que «funcionará bien», precisó Efe.
El anterior Ejecutivo español, presidido por el conservador Mariano Rajoy (PP, centroderecha), acordó en septiembre de 2017 intervenir las cuentas y las finanzas catalanas para evitar que pudiera desviar fondos para la organización del referendo independentista del 1 de octubre,suspendido por el Tribunal Constitucional.
El nuevo Ejecutivo español (PSOE) ha dado instrucciones a los bancos para que el Gobierno regional catalán pueda abordar los pagos que le corresponden sin necesidad de pasar por la supervisión del Ministerio de Hacienda.
Según Celaá, se trata de una «medida de normalización» y precisó que eso no significa «en absoluto» que el Gobierno español «no vaya a estar informado de las eventuales partidas que pudieran dirigirse a cuestiones catalanas».
La ministra portavoz se mostró segura de que el Gobierno de Cataluña hará sus provisiones de gasto con arreglo a la ley y según sus competencias.
Respecto a una posible entrevista del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, con el presidente regional de Cataluña, el independentista Quim Torra, Celaá aseguró que está prevista, igual que con el resto de presidentes regionales, aunque no dio fechas.
La portavoz insistió en que Sánchez llevará «la Constitución en una mano y el diálogo en la otra con la voluntad de avanzar».
El conflicto político que existe en España por las aspiraciones independentistas del Gobierno de Cataluña fue un asunto recurrente en la rueda de prensa tras el primer Consejo de Ministros del socialista Pedro Sánchez.
Celaá insistió en que solucionar ese conflicto es una cuestión «prioritaria» y situó la cuestión de la integridad territorial como «el principal problema» que tiene España. Para solucionarlo dijo que es necesario abrirse al diálogo y trasladar a la sociedad este ánimo de normalizar.