Su nombre es Rocío del Valle y es la embajadora del gobierno de Venezuela en el Reino Unido.
La diplomática cobró entre julio y noviembre de 2012 en la Banca Privada de Andorra al menos cuatro millones de dólares de un testaferro del empresario venezolano de los seguros Diego Salazar, primo de Rafael Ramírez, expresidente de Pdvsa, el hombre de confianza de Hugo Chávez que fue purgado por Maduro.
Una investigación de El País de España, firmada por Joaquín Gil y José María Irujo, señala que “Rocío del Valle, ocultó desde 2012 cuatro millones de dólares (3,5 millones de euros) en Andorra, un país blindado hasta 2015 por el secreto bancario (…) Los fondos tienen su origen en la corrupción de Venezuela”.
“La diplomática justificó el pasado septiembre ante una juez del pequeño principado pirenaico que su dinero en Andorra procedía de la venta de los derechos de una herencia en Venezuela (…) Del Valle movió el capital bajo sospecha a través de cuatro cuentas en la Banca Privada d’Andorra (BPA). Y se sirvió de una estructura de sociedades instrumentales creadas en Panamá por el propio banco para transferir su caudal económico”, asegura el texto.
La diplomática aseguró a una juez de Andorra “que el dinero que ingresó en la BPA procedió de la venta en 2011 de unos derechos de herencia – donde figuraba entre los 14 beneficiarios- de un terreno de 19.000 hectáreas que su familia tenía en el estado venezolano de Sucre. El comprador, que pagó cinco millones de euros, fue el propio Salazar, amigo de su familia, según la declaración judicial de la diplomática. Salazar, añadió, fue también quien le recomendó abrir una cuenta en la entidad andorrana”.
“La magistrada indaga también si Del Valle percibió de Salazar 60.000 euros en una cuenta en un banco chino y unas vacaciones de lujo de una semana en París. Del Valle tildó de regalo esta última prebenda”, concluye el texto.
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