Ataque contra el hotel Intercontinental de Kabul

Una insoportable espera se prolongaba el sábado por la noche en Kabul más de cinco horas después del inicio de un asalto contra el hotel Intercontinental de Kabul, donde penetraron cuatro hombres armados y empezaron a disparar contra los clientes.

AFP

Según una fuente de los servicios de espionaje afganos, «dos asaltantes siguen atrincherados en dos lugares diferentes» del hotel de cinco pisos y siguen resistiéndose a las fuerzas especiales

«Las operaciones continúan, un segundo asaltante fue abatido. Siete heridos fueron evacuados del primer y segundo piso, ahora completamente despejados. Pero avanzamos lentamente para evitar víctimas civiles» entre los clientes y el personal, había indicado anteriormente a la AFP el portavoz adjunto del ministerio del Interior, Nasrat Rahimi.

La operación no fue reivindicada y no se publicó ningún balance, pero los medios locales daban cuenta de numerosos muertos y heridos en las plantas despejadas.

El comando penetró en el hotel poco después de las 21H00 (17H30 GMT), provocando una explosión para abrirse camino antes de disparar, con granadas principalmente, contra los guardias y los clientes.

«Cuatro asaltantes están en el interior del edificio, están disparando contra los clientes», anunció a la AFP un responsable de la Dirección Nacional de Seguridad (NDS), los servicios secretos afganos.

Se cortó la electricidad en el barrio del hotel, ubicado en una colina en el oeste de Kabul, que estaba sumido en la oscuridad, excepto por las altas llamas que emergían del techo.

El comando abrió fuego en el cuarto piso del hotel antes de atrincherarse en la segunda planta, según otra fuente de seguridad.

«Puedo escuchar disparos que parecen venir del primer piso, pero no veo dónde están. Estamos escondidos en nuestras habitaciones. Hagan que los servicios de rescate lleguen pronto», contó a la AFP un cliente del establecimiento bajo condición de anonimato y que dijo encontrarse en la tercera planta.

Un periodista de la cadena de televisión local Tolo News presente en el lugar informó igualmente en Twitter de que seguía «oyendo disparos más de dos horas después» del inicio del ataque.

En Twitter, los familiares preguntaban si había noticias de sus parientes alojados en el hotel. «Mi tío está allí, su teléfono no da señal. Toda información es bienvenida».

Desde Washington, el Departamento de Estado instó a que se informara de si había ciudadanos estadounidenses en el establecimiento.

– Fuerte vigilancia –

Según el portavoz del ministerio de Interior, Najib Danish, la seguridad del hotel corría a cargo de una nueva compañía desde hacía poco.

«Estamos investigando para comprender por dónde entraron los asaltantes, pudieron utilizar las puertas de la cocina trasera».

El hotel Intercontinental de Kabul, uno de los establecimientos de lujo de la capital afgana que cuenta con cuatro restaurantes – pero no pertenece a la cadena internacional epónima – acoge con frecuencia bodas, conferencias, y reuniones políticas.

Su azotea iluminada con vistas sobre Kabul es particularmente popular entre las clases más adineradas.

Un responsable del ministerio de Telecomunicaciones, Abdulá Sabet, indicó a la AFP que unos cuarenta directores y responsables provinciales del país se alojaban el sábado por la noche en el hotel, para una conferencia prevista el domingo.

«No sabemos si resultaron heridos o muertos», confesó.

En la mañana del sábado se había celebrado una conferencia sobre la presencia y las inversiones chinas en Afganistán.

El hotel, abierto en septiembre de 1969, ya fue objetivo de un ataque reivindicado por los talibanes en junio de 2011, que dejó 21 muertos.

Desde entonces, el hotel estaba bajo fuerte vigilancia, con accesos reservados. Pero está rodeado por jardines y vegetación que pueden permitir entrar discretamente.