Los tres actores de Hollywood que fueron seducidos por Meghan Markle: George Clooney salió en su defensa

La Duquesa de Sussex se intentó hacer un hueco en el mundo cinematográfico de Estados Unidos.

Meghan Markle no está viviendo una situación tanquilla desde que entrara de lleno en la Casa Real inglesa. La Duquesa de Sussex ha estado en el centro de la polémica en multitud de ocasiones y la prensa británica es una de las que más críticas está profiriendo a la mujer del Príncipe Harry, reseña DiarioGol

Las últimas semanas de embarazo

Ahora, vive impaciente sus últimas semanas antes de dar a luz a su primer bebé, que muchos apuntan en las Islas Británicas que será niña. Esa noticia volverá poner en el primer plano a Meghan, que será madre de una de las herederas a la Corona.

El pasado oscuro de Meghan

Y es que, el pasado de Meghan, ha sido uno de los temas que más controversias ha conllevado en Reino Unido. Sus numerosos escarceos amorosos, con más de una decena de amantes y parejas, es uno de los asuntos que menos gustan entre la familia real británica.

E incluso, algunos apuntan que, durante su estancia en Estados Unidos, donde participaba en series y cortometrajes, Meghan intentó conquistar a alguno de los actores más importantes de Hollywood. Los que la conocen cuentan que su objetivo era seducir a una estrella estadounidense. Y nombres como Orlando Bloom, Leonardo Di Caprio o Brad Pitt fueron objetivos de la Duquesa de Sussex.

De hecho, los medios británicos no confirman que llegase a tener ningún romance con alguno de estos actores de contrastada reputación, aunque sí que apuntan que fueron varias las ocasiones que compartió acto con alguno de ellos y ahí pudo comenzar una bonita ‘amistad’.

La defensa de su amigo

Eso sí, ante tanta crítica, George Clooney ha tenido que salir al paso: Es una mujer que está embarazada de siete meses y la están persiguiendo y denigrando igual que hicieron con Diana. La historia se está repitiendo”, apunta uno de los grandes amigos de Markle.

Estos nuevo rumores vuelven a ponerla en el disparadero y se convierte en una razón más para que Kate Middleton, su cuñada, no quiera ni verla en pintura por Buckingham Palace.