Padres desesperados estiran el dinero para comprarles los estrenos a sus hijos

A una semana de la Nochebuena, los marabinos hacen una pausa para incluir, entre sus prioridades, los tradicionales estrenos de Navidad y Año Nuevo. El movimiento en locales y centros comerciales delata a esperanzados papás, reseñó Panorama.

Luchar por mantener vivo el espíritu navideño es el común denominador entre los marabinos. Aún con una crisis económica que dificulta repetir, a lo grande, la tradición de estas festividades, muchos han decidido que no se dejarán vencer por ello.

Es así como levemente aumentó el número de compradores en los locales y centros comerciales de la ciudad. Las zapaterías son las más concurridas y en segundo lugar, las tiendas de ropa.

Padres han optado por evaluar las opciones de varios locales para comparar precios y economizar. También“pescan” promociones y ofertas comunes en esta época del año. Se esfuerzan para que sus hijos no se vayan “en blanco” este año con los típicos “estrenos”.

“Trato de mantener la ilusión de mis hijas”, dijo una mujer, mientras compraba a sus pequeñas modelos coloridos de zapatos que, entre risas, seleccionaron de muchos que se probaron.

El brillo en los ojos de los niños resplandece apreciando en las vitrinas los modelos de calzado y tomados de la mano, los acompañaban a los adultos, recorriendo con la mirada precios cercanos al millón de bolívares.

A partir de Bs. 500 mil y por encima del millón y medio de bolívares se consiguen los calzados para niños y niñas. Para damas, las sandalias de “diario” pueden marcar desde 400.000 bolívares hasta los 800 mil, mientras que los zapatos de tacón alto pueden alcanzar, fácil, los 2 millones de bolívares.

En el caso de los caballeros, para referise a los precios de los zapatos de vestir y de los deportivos, se debe hablar de millones de bolívares, pues los precios no bajan de esa denominación.

Los negocios de ropa infantil son los más acudidos, para armar o completar “la pinta”.

Un vestido para niña puede costar entre Bs. 400 mil y el millón de bolívares. Los conjuntos de blusita y pantalón pueden costar Bs. 2 millones.
Las camisas para niños se encuentran a partir de 800 mil y los pantaloncitos en promedio cuestan millón y medio de bolívares.

Luis Guevara, padre de familia, fue a comprarle a su hijo un par de zapatos. Al llegar al establecimiento, los precios habían dejado corto al presupuesto que había destinado para calzar a su pequeño. El hombre no descartó buscar el dinero restante para completar la suma y poder adquirir el “estreno”.

La felicidad e inocencia de los niños no debería empañarse por muy difícil que esté la economía, opina Melania Boscán, mercadóloga. “Un sacrificio más que se hace por ellos para que recuerden con ilusión las navidades y el año nuevo. No podemos darle el gusto a las circunstancias económicas de que nos arruinen una época tan bonita como esta”, dijo la mujer.