Los pechos altos y firmes son orgullo de cualquier mujer. Lamentablemente, el paso del tiempo y la influencia de otros factores provocan que el tejido conectivo de las mamas comience a perder su elasticidad, causando la caída del pecho o la ptosis mamaria.
La ptosis afecta en mayormente a los pechos grandes, lo que no significa que los de menor tamaño estén libres de padecerla. El factor determinante reside en la resistencia y elasticidad de la piel.
Las causas de la caída de los senos:
Fumar (reduce la elasticidad de los tejidos).
Aumento o disminución radical en el peso corporal.
El embarazo y la lactancia.
Menopausia.
Un sujetador no adecuado.
Una alimentación poco saludable.
Enfermedad grave.
Cómo devolver la elasticidad al pecho
¡Qué pasada! te propone 3 métodos para prevenir la caída de los senos, pero si los pones en práctica de manera integrada, obtendrás mejores resultados.
1. Ejercicios para el pecho
Si te mantienes en una dieta estricta, ten en cuenta que los muslos y senos pueden perder su redondez. Por eso, asegúrate de incluir en el programa de entrenamiento (en la casa o en el gimnasio) unos ejercicios para la elasticidad de los senos. Esto fortalecerá e irrigará mejor los músculos del pecho.
Asegúrate de usar un sujetador deportivo durante los ejercicios: la piel de las mamas es muy delgada y, debido a las grandes cargas, se puede estirar aún más.
También es importante hacer ejercicios para la postura, ya que sin una espalda y hombros bien erguidos, no podrás lucir un pecho esbelto.
2. Productos para el pecho
Aumenta el consumo de alimentos ricos en proteínas, calcio, vitaminas A y E: queso, yogur, huevos, pescado de mar, aceitunas, aguacate, manzanas, frijoles y verduras frescas. Presta una especial atención a la granada. Este es uno de los frutos más eficaces para mantener la elasticidad de las mamas.
Tampoco debes descuidar el régimen hídrico: la escasez de agua en el cuerpo provoca que los tejidos conectivos pierdan la elasticidad.
3. La máscara para la elasticidad del pecho
Esta máscara casera para los senos y la región del escote te ayudará a aumentar la elasticidad y turgencia de la piel. Para prepararla, mezcla 1 huevo, una cucharada de yogur y una cucharada de vitamina E líquida (disponible en farmacias). Aplícala sobre la piel durante 20 minutos y luego enjuágala. Usa esta mascarilla 2 veces por semana.
Un suave masaje con jugo de aloe puede ayudar a darle tono a la piel de los senos. Aplica este jarabe con movimientos muy delicados, y déjalo actuar durante 10 minutos antes de lavar la piel con agua fría.
¡La belleza del pecho es muy importante, pero lo más importante es tu salud! Los especialistas recomiendan someterse a exámenes de mamografía preventiva a partir de los 18 años, y después de 40 años una vez al año. El diagnóstico precoz de cualquier patología evita complicaciones graves.
Comparte este post con tus amigas… ¡El pecho saludable puede recobrar la firmeza y hermosura!
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