Ana Isabela se despide de su tortura

La Policía científica detuvo a la madre como cómplice de Javier Atencio (22), alias el «Guajiro», quien violó a la niña durante los tres meses que convivieron y finalmente la mató a golpes

Al sepelio de Ana Isabel Sulbarán, de siete meses, no asistió su madre, Emili Sulbarán (25). La Policía científica la detuvo como cómplice de Javier Atencio (22), alias el «Guajiro», quien violó a la niña durante los tres meses que convivieron y finalmente la mató a golpes.

El pequeño ataúd blanco lo cargaban sus familiares. Ninguno lloraba en la procesión al sepulcro, en el cementero municipal San Francisco de Asis, en el municipio sureño. Los presentes murmuraban: «Esto se veía venir, por no hablar es que pasaron las cosas».

Cuando llegó el momento de la despedida la docena de asistentes se aglomeraron alrededor del féretro. Querían ver por última vez el diminuto cadáver.

«Por temor ella no denunció al guajiro, prefirió callar. Ese hombre es un drogadicto», denunció María Sulbarán, en medio del cementerio. Presuntamente en los cuatro meses que duró el amorío entre la  pareja, Atencio golpeaba a Emili, a los tres hijos de la dama, a su madre Íngrid Atencio y a una de sus hermanas.

Sulbarán denunció que después del crimen conocieron que el «Guajiro» tenía antecedentes por violencia de género. «A su anterior pareja la golpeó fuertemente hasta enviarla al hospital».

La familia presume que el homicida se esconde en La Cañada de Urdaneta o en La Guajira, donde tiene familia. Mientras que Emili fue presentada ayer ante un tribunal de control del Palacio de Justicia por lesiones. A su suegra, Íngrid Atencio; y a su cuñada las llevaron a declarar, pero no están detenidas.